top of page

¿Por dónde empezamos a transformar la educación en Paraguay?

Educación es la primera palabra que está en boca de todos cuando se habla de construir el Paraguay que queremos. Sin embargo, la complejidad y los desafíos que aparecen ante cualquier análisis son múltiples.


Con el objetivo de analizar el sistema educativo en Paraguay en un diálogo informado y crítico, Paraguay Ahora organizó un encuentro para abordar procesos históricos, paradigmas subyacentes y las falencias que persisten, y así saber dónde estamos y poder identificar hacia dónde queremos ir.


Federico Mora, miembro del grupo de dialogantes de la plataforma, dio apertura al evento y explicó que el equipo organizador propuso el espacio para, entre otros objetivos, visibilizar los puntos críticos en torno a los cuales construir metas, sean de corto o mediano plazo. El primer momento del encuentro contó con las exposiciones de Marta Lafuente, exministra de Educación; de Luis Ramírez, asesor e investigador educativo; y de Carmen Romero, directora ejecutiva del Fondo para la Excelencia en Educación e Investigación (FEEI).



El lastre autoritario de la educación paraguaya


Marta Lafuente hizo la primera exposición, donde reflexionó sobre los aprendizajes del camino andado en educación y los principales desafíos, su repaso abarcó la evolución del sistema educativo paraguayo desde el periodo dictatorial.


Tras la caída de Alfredo Stroessner, la primera voz de libertad de la ciudadanía fue sobre la reforma educativa, rememoró. El Ministerio de Educación tuvo que transformarse de un aparato de control ideológico a uno que promoviera la educación como derecho y la cultura democrática.


Los impulsores de la reforma, un grupo civil reconocido intelectualmente y asesorado por expertos internacionales, propusieron empezar el proceso de cambio por la educación superior. Sin embargo, encontraron que el acceso a la educación primaria era muy bajo en Paraguay, por lo que se tuvieron que reorientar los planes.

Otro desafío fue la rehabilitación y promoción del guaraní, sobre lo cual no había mucha experiencia. Paraguay era el único caso en la región de una lengua amerindia hablada por la población no indígena.

Hoy, uno de los grandes escollos sigue siendo la educación primaria. Hay un acceso universal al principio de la escolaridad que luego cae dramáticamente conforme avanzan los años. Lafuente observó que, aún con las limitaciones, se tiene evidencias de indudables resultados positivos en aquellos que asistieron a la educación inicial, y una mayor retención escolar.

Lafuente criticó que el sistema educativo paraguayo no haya logrado hacer mella en las rígidas estructuras sociales.